Si se desquicia, pierde la confianza y no juega tan bien como lo hace siempre cuando tiene una mala racha deberá replantearse si el póquer profesional está hecho para usted.
Para un jugador profesional el póquer deja de ser un juego y se convierte en un modo de vida. Un aficionado deja la mesa de juego y sigue con su “otra vida”.
Para un profesional “La calidad de vida está directamente relacionada con el éxito en la mesa de póquer hasta el punto que, si un profesional no gana dinero durante un período suficientemente largo, no podrá cubrir siquiera sus necesidades más básicas”, señalan Taylor y Hilger en su famoso y recomendable libro “The póquer mindset”, y seguidamente añaden que esto no debería sucederle nunca un jugador ganador que tiene un presupuesto adecuado, “no hay duda de que le rondará por la cabeza cuando las cosas le vayan mal” afirman.
La ira, la frustración y la depresión son enemigos bien conocidos del jugador que padece una mala racha. “Un jugador profesional tendrá que superarlo todos y, además, el miedo y, en un momento dado, el pánico”, aseguran los autores.
